El interés crítico o
enmancipador está unido al concepto de libertad ya que está relacionada con el
habla, la expresión y la comprensión, busca con ellos la verdad y la justicia.
Este tipo de interés da
lugar a una acción autónoma, prudente, responsable y crítica a nivel del
currículo, se traduce en la liberación del individuo de falsas consciencias y
establece una relación entre la autorreflexión y la acción.
Se entiende por tanto una
perspectiva enmancipadora en el acto de enseñanza, ya que es un proceso de
negociación permanente, la selección de contenidos es la representación
organizada, sistematizada y desarrollada de las temáticas que consideren
incorporar, este proceso no se da al azar, surge de las reflexiones
sistemáticas durante el acto pedagógico.
El currículo por lo tanto es
negociado con los estudiantes, se visualizan estrategias variadas para
aprender, se realizan procesos de reflexión sobre las particularidades
individuales y colectivas para aprender y en consecuencia autoevaluar los
aprendizajes.
En este enfoque la
evaluación es un componente del proceso de enseñanza-aprendizaje donde los
actores intervienen con el ánimo de plantear estrategias para optimizar el
aprendizaje, es válida la autoevaluación, la heteroevaluación y la
coevaluación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario